Aromaterapia Científica:  Una de las principales aplicaciones de los aceites esenciales (AE) es la prevención de infecciones virales. Estos extractos vegetales tan concentrados son capaces de eliminar virus o bacterias.

Las sinergias de aceites esenciales (mezcla de distintos AE) suman y potencian sus efectos estimulantes del sistema inmune, antivirales, antiinflamatorios y son muy efectivos para prevenir los contagios. VER MEDICAMENTOS LINEA DEFENSAS.

Zinc: Los coronavirus parecen ser susceptibles a las acciones inhibidoras virales del zinc. El Zinc puede prevenir la entrada de coronavirus en las células y parece reducir la virulencia de coronavirus. Además, proporciona efectos protectores directos en el tracto respiratorio superior.

Algunos alimentos ricos en zinc son: almendras, avena, pechuga de pollo, semillas de zapallo y legumbres.

Vitamina C: Distintos ensayos clínicos han mostrado que la vitamina C acorta la frecuencia, duración y gravedad del resfriado común y la incidencia de neumonía. Al igual que los flavonoides, el ácido ascórbico inhibe la activación del inflamasoma NLRP3. 

Microbiota o flora intestinal: La evidencia muestra que la calidad de nuestra microbiota está directamente relacionada con la actividad y buen funcionamiento de nuestro sistema inmune. Es importante fortalecerla con una dieta rica en fibra y alimentos vegetales. Ayudan especialmente el consumo de achicoria, zanahoria, zapallo italiano y betarragas crudas. También es favorable consumir alimentos fermentados como chucrut (sin vinagre) y kombucha que contienen bacterias probióticas.

El uso de probióticos (suplementos que contienen bacterias benéficas en capsulas) es muy recomendable sobretodo si se ha estado bajo tratamiento con medicamentos antiácidos como omeprazol, lansoprazol y esomeprazol por más de dos meses o tratamiento antibiótico reciente (o su uso 2 o más veces en el ultimo año).

Melatonina: Se ha demostrado que la melatonina es antiinflamatoria. También reduce el daño oxidativo en pulmones y reclutamiento de células inflamatorias durante infecciones virales. VER BLOG «Recomendaciones para fortalecer el sistema inmune: Sueño» 

Curcumina: Es un componente clave de la cúrcuma, tiene acciones antiinflamatorias y efectos antivirales contra una variedad de virus similares.

La curcumina como flavonoide aislado se absorbe poco. Existen múltiples formas de mejorar su absorción. Un método es consumir cúrcuma en polvo que contiene curcumina junto con grasas como la leche o aceite de coco. Así es como la curcumina se obtiene tradicionalmente a través de la dieta.

Al usar suplementos, la absorción de curcumina se puede mejorar combinándola con piperina, que es un derivado de la pimienta. La absorción de la curcumina también se puede mejorar cuando se toma como un fitosoma, que combina la curcumina con un fosfolípido.  Finalmente, otro suplemento de curcumina con absorción mejorada utiliza nano curcumina combinada con goma ghatti. Todas estas formas de suplementación con curcumina tienen una absorción superior, pero también son más costosas.

Otros agentes inmunoestimuladores y antivirales naturales de uso común:

Los siguientes alimentos y suplementos no parecen aumentar las citoquinas proinflamatorias, responsables de respuesta inmune exagerada, como parte de sus acciones inmunomoduladoras. Varios de estos, de hecho, reducen estas citoquinas y pueden restaurar la homeostasis inmune. Por lo tanto, es probable que sean seguros de usar tanto antes como durante la infección por COVID-19:

• Allium sativum (ajo).
• Quercetina.
• Astrágalo (Astragalus membranaceus) .
• Extractos de micelio de hongos y extracto de hongo Agaricus blazei.
• Mentha piperita (menta).
• Andrographis paniculata.
• Té verde y extractos de té verde.